martes, 3 de febrero de 2009
LA IRA DE LUCCIO ANNEO SÉNECA
"El hombre ha nacido para ayudar al hombre,la ira para la destrucción común"
Hoy he tropezado con esta frase del ensayo escrito por Séneca a su hermano, quién le pide consejo sobre la ira, despertó en mi cierta reflexión, ya que las circunstancias de mi vida, me habían llevado a sentir un poco de esta "locura temporal"... al leer este texto entendí un poco más de nuestra naturaleza animal.. Ojala sirva de algo compartirlo.
Me exigiste, caro Novato, que te escribiese acerca de la manera de dominar la ira, y creo que, no sin causa, temes muy principalmente a esta pasión, que es la más sombría y desenfrenada de todas. Las otras tienen sin duda algo de quietas y plácidas; pero esta es toda agitación, desenfreno en el resentimiento, sed de guerra, de sangre, de suplicios, arrebato de furores sobrehumanos, olvidándose de sí misma con tal de dañar a los demás, lanzándose en medio de las espadas, y ávida de venganzas que a su vez traen un vengador. Por esta razón algunos varones sabios definieron la ira llamándola locura breve; porque, impotente como aquélla para dominarse, olvida toda conveniencia, desconoce todo afecto, es obstinada y terca en lo que se propone, sorda a los consejos de la razón, agitándose por causas vanas, inhábil para distinguir lo justo y verdadero, pareciéndose a esas ruinas que se rompen sobra aquello mismo que aplastan. Para que te convenzas de que no existe razón en aquellos a quienes domina la ira, observa sus actitudes. Porque así como la locura tiene sus señales ciertas, frente triste, andar precipitado, manos convulsas, tez cambiante, respiración anhelosa y entrecortada, así también presenta estas señales el hombre iracundo. Inflámanse sus ojos y centellean; intenso color rojo cubre su semblante, hierve la sangre en las cavidades de su corazón, tiémblanle los labios, aprieta los dientes, el cabello se levanta y eriza, su respiración es corta y ruidosa, sus coyunturas crujen y se retuercen, gime y ruge; su palabra es torpe y entrecortada, chocan frecuentemente sus manos, sus pies golpean el suelo, agítase todo su cuerpo, y cada gesto es una amenaza: así se nos presente aquel a quien hincha y descompone la ira. Imposible saber si este vicio es más detestable que deforme. Pueden ocultarse los demás, alimentarles en secreto; pero la ira se revela en el semblante, y cuanto mayor es, mejor se manifiesta. ¿No ves en todos los animales señales precursoras cuando se aprestan al combate, abandonando todos los miembros la calma de su actitud ordinaria, y exaltándose su ferocidad? El jabalí lanza espuma y aguza contra los troncos sus colmillos; el toro da cornadas al aire, y levanta arena con los pies; ruge el león; hínchase el cuello de la serpiente irritada, y el perro atacado de rabia tiene siniestro aspecto. No hay animal, por terrible y dañino que sea, que no muestre, cuando le domina la ira, mayor ferocidad. No ignoro que existen otras pasiones difíciles de ocultar: la incontinencia, el miedo, la audacia tienen sus señales propias y pueden conocerse de antemano; porque no existe ningún pensamiento interior algo violento que no altere de algún modo el semblante. ¿En qué se diferencia, pues, la ira de estas otras pasiones? En que éstas se muestran y aquélla centellea
Séneca define la ira como una locura breve,un sentimiento sin control,que no poseemos,sino que nos posee y nos domina temporalmente.
El autor propone reconducir por el buen camino a los mahechores,en vez de castigarlos con la ira.Sin embargo propone la aplicación del código romano,caracterizado por la severidad y la crueldad.
La justicia que propone Séneca no tiene misericordia,"en ocasiones la mejor clase de misericordia es la muerte".Como podemos ver,las afirmaciones del filósofo están dominadas por la contradicción,Luccio Anneo Séneca cae en su propia trampa,en su propia ira.
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a mí me impresiona la imagen de séneca, con esas arrugas que se marcan en su rostro como si soportase él solo todo el dolor del mundo
ResponderEliminarme da miedo el peso que parece llevar en su mirada, ¿será que la vida te va pesando y cuanto más sabio eres más triste? ¿es la ignorancia la verdadera felicidad? ¿es inevitable terminar así?
Que guay, me encanta pasarme por aqui, y mas si te da el momento cultuteta (en el buen sentido... ) y aprendo cosas... me encanta...
ResponderEliminara mí la ira me parece como la peli del exorcista... entra, y hasta que sale no eres dueño de tí mismo
ResponderEliminarun saludo
todos caemos en esa trampa, no???besitos.
ResponderEliminarjoer, eso si que es reconducir! Pero eso es la contradicción de hoy en día aún se practica. La sociedad encierra a los malhechores para "reconducirlos" pero no dejan de ser pudrideros de seres humanos tratados con toda crueldad.
ResponderEliminarA mi la verdad es que séneca me queda muy lejos...
Bezos sin ira, pero de muerte (de ricos, vamos, jaajaj).
Nunca leí a Séneca, pero tengo mi propio concepto de la ira.
ResponderEliminarAunque sea un estado momentáneo de locura, ese momento puede ser muy destructivo.
Mejor dejarla en casa.
Besos, mientras tanto...
Ay madre, te veo últimamente muy irascible!
ResponderEliminarun besazo
Malo es cuando la ira nos domina a nosotros.
ResponderEliminarA Séneca ya su propios contemporaneos le recriminaron sus muchas incongruencias, como el que predicara el estoicismo y la pobreza pero él fuera el hombre más rico de Roma, más que el propio emperador Nerón. También se le criticó duramente por este diálogo que dedicó a la ira, y en cierta manera él mismo reconoció lo acertado de los reproches porque al poco tiempo escribió otro tratado dedicado, esta vez, a la Clemencia.
ResponderEliminarMuy interesantes las reflexiones de Séneca, y las aportaciones que tú haces, sobre esa emoción humana tan devastadora, tanto para nosotros mismos, como para los demás, pero ¿quién no ha sentido alguna vez su fuerza destructora? Aprender a manejarla, a dominarla es toda una conquista, pero no siempre está a nuestro alcance. Un abrazo Brilli- Brilli.
ResponderEliminarSéneca es el pro-hombre de su tiempo. Yo diría que hasta parte del mismo es obra suya. Y tiene razón. Y por ello, obra en consecuencia.
ResponderEliminar¿Cómo murió Séneca?
Abrazos!
Impactante post. Las veces que he leído algo de Séneca las opiniones siempre fueron mas que encontradas, los autores hablaban muy bien o muy mal de él. Cuál será la verdad?
ResponderEliminarBESOS
Gracias por tus palabras de apoyo.
ResponderEliminarBESOS
Yo me lo encuentro por el pasillo de mi casa por la noche, que me hubiera levantado a hacer pipí, y lo veo con esas túnicas, esa cara y una vela en la mano, y me lo hago encima...y eso que era de mi tierra!
ResponderEliminarAunque muy interesante de leer, no esoy de acuerdo.
ResponderEliminarAbrazos.
Hace tiempor estaba usted esperando resultado de analítica.
¿Cómo va?
Paz y amor. Nada de ira, ommmmmmmmmm
ResponderEliminarComo buen pensador Seneca cae en contradicciones no solo en sus escritos, sino en su vida pública y privada.
ResponderEliminarPero de él podemos extraer como lo has hecho tú, muy interesantes propuestas, pese a los avatares de la vida, que no creas habrán influido poco en él.
No me extraña que terminara como lo hizo...
ResponderEliminarPues si, cari, yo no estoy en días de ira, sino de amor...
ResponderEliminarBezos.
Hola Brilli, estoy en tu blog. Suelo visitar de pasada los blog que me interesan, los añado a mis favoritos y siempre encuentro un día, un momento, un ratito, para entrar en ellos sin nada que me distraiga. Estoy leyendo tus post (muy bien ordenados, por cierto) y la vida de ese niño que veía injusto que al pequeño de la casa se le consintiera todo.
ResponderEliminarMuy interesante. Yo diría que es toda una novela. Tengo que leerlo todo, me interesa, me interesa mucho, muchísimo y no descarto la posibilidad de recomendar tu blog en el mío un día de estos. Si me das tu permiso, claro. Tengo pendientes algunas cosillas que quiero incluir en el blog, pero ya sabes que todo llega en su momento. Es más... ¿Has leído el libro de Saramago "El viaje del elefante"? Yo no, pero sí que he visto una frase en la contraportada que me ha llamado mucho la atención. Dice algo así como que nunca llegamos tarde a donde nos estaban esperando.
Un beso y enhorabuena por tu rincón de blog.
Mercedes.
Séneca no se aclaraba ni él mismo, vamos. Y se las daba de filósofo!! Así cualquiera... me está poseyendo una ira que no veas...
ResponderEliminarXDDDDDD